En este pedaciño de terra

¡Ya tengo piso! Tras una larga búsqueda, tras ver unas cuantas ratoneras a precio de oro, tras patear agobiada las calles de Coruña, de un piso a otro, dando vueltas cual perrito tras su rabo, al final he encontrado un lugar genial donde vivir, de 3 habitaciones, sala, baño y cocina, soleado, con vistas a la calle, cerca de la parada del autobús en el que subo al laboratorio y bastante céntrico. ¡Qué carajo, si me queda a 10 min andando del corte inglés! Mañana firmo el contrato, así que a no ser que entre hoy y mañana suceda algo inesperado que me joda la semana, el viernes estamparé mi firma en el pedacito de papel que dirá que ya no vivo en el pueblo. Estoy muy contenta, la verdad. Por fin una buena noticia que pinta una sonrisilla en mi cara. Una preocupación menos. Yo, que odiaba los martes y 13 (y no porque sea supersticiosa, pero ya se sabe, que haberlas hailas), he conseguido firmar un contrato laboral y encontrar piso en esa fecha. Ahora sólo falta mudarse. Aventura tras otra, me voy acercando más a mi ideal de independecia. Aissssshhhh, que voy a vivir solita en la ciudad! ¡Ahora sí que empieza lo bueno!